¡Hola a todos, amantes de la buena mesa! ¿Listos para una explosión de sabor y color que os hará sentir en una nube? Hoy os traigo una receta que combina lo mejor de dos mundos: la ligereza de unos crêpes y la frescura de las espinacas, todo ello envuelto en un relleno cremoso y delicioso. Olvídate de los platos aburridos y dale la bienvenida a estas maravillosas crêpes verdes de espinacas rellenas de ricotta y nueces. Son perfectas para una cena ligera, un brunch especial o incluso como una entrada sofisticada. Su vibrante color verde las hace irresistibles a la vista, y su relleno suave con el toque crujiente de las nueces es pura magia. ¡Prepara tu paladar para un viaje culinario inolvidable!
Tiempo de preparación: 25 minutos (+ 30 minutos de reposo)
Dificultad: Fácil
Raciones: Para 4 personas
Ingredientes
- Para los Crêpes Verdes:
- 150 g de espinacas frescas (aproximadamente un manojo grande)
- 250 ml de leche (puede ser vegetal)
- 2 huevos grandes
- 125 g de harina de trigo (o sin gluten)
- 1 pizca de sal
- Aceite o mantequilla para engrasar la sartén
- Para el Relleno:
- 250 g de queso ricotta
- 70 g de nueces peladas y picadas gruesas
- 50 g de queso parmesano rallado (opcional, para un extra de sabor)
- 1 diente de ajo pequeño, muy picado o rallado (opcional)
- Sal y pimienta negra recién molida al gusto
- Una pizca de nuez moscada (opcional)
- Unas hojas de albahaca fresca o perejil picado para decorar
Preparación paso a paso
- Prepara la masa de los crêpes: Lava muy bien las espinacas. En una batidora, mezcla las espinacas frescas con la leche y los huevos hasta obtener una mezcla homogénea y de un color verde intenso.
- En un bol grande, vierte la mezcla líquida de espinacas. Añade la harina y la pizca de sal. Bate con unas varillas (manuales o eléctricas) hasta que no queden grumos. La masa debe ser fluida. Si ves que está muy espesa, puedes añadir una cucharada más de leche.
- Cubre el bol con film transparente y deja reposar la masa en la nevera durante al menos 30 minutos. Esto ayuda a que la harina se hidrate bien y los crêpes queden más elásticos y no se rompan.
- Cocina los crêpes: Calienta una sartén antiadherente de unos 20 cm a fuego medio. Engrasa ligeramente con un poco de aceite o mantequilla (puedes usar un trozo de papel de cocina para extenderlo).
- Vierte un cazo pequeño de masa en el centro de la sartén, inclinándola y rotándola rápidamente para que la masa cubra toda la base de forma fina y uniforme. Cocina durante 1-2 minutos por cada lado, hasta que los bordes estén dorados y el crêpe se despegue fácilmente. Repite el proceso con el resto de la masa, apilando los crêpes cocidos en un plato.
- Prepara el relleno: Mientras se enfrían un poco los crêpes, en un bol mediano, mezcla el queso ricotta, las nueces picadas, el queso parmesano (si lo usas), el ajo picado (si lo usas), la sal, la pimienta y la nuez moscada. Remueve bien hasta integrar todos los ingredientes. Prueba y ajusta la sazón si es necesario.
- Rellena y sirve: Extiende un crêpe en un plato. Coloca una porción del relleno de ricotta y nueces en el centro o a lo largo de uno de los extremos. Dóblalo por la mitad y luego otra vez, formando un triángulo, o enróllalo suavemente para formar un canelón.
- Sirve inmediatamente, decorando con unas hojas de albahaca fresca o perejil picado. ¡Disfruta de esta delicia verde!
Consejos de Nuria:
- Para una masa extra fina: Si quieres que tus crêpes sean aún más delicados, puedes colar la mezcla de espinacas después de batir para eliminar cualquier fibra gruesa de las espinacas.
- Toque cítrico: Añade una cucharadita de ralladura de limón al relleno de ricotta para un punto de frescura que realza los sabores.
- Variantes del relleno: Si no eres fan de las nueces, puedes sustituirlas por piñones tostados o almendras laminadas. Para una versión más proteica, añade un poco de pollo desmenuzado.
- Servicio: Aunque son deliciosos por sí solos, estas crêpes combinan de maravilla con una salsa de tomate casera ligera por encima, o simplemente un chorrito de un buen aceite de oliva virgen extra y unas escamas de sal marina.
- Conservación: Los crêpes ya cocidos pueden guardarse en la nevera apilados y envueltos en film transparente durante 2-3 días. El relleno también se conserva bien en un recipiente hermético.
Espero de corazón que os animéis a preparar estas crêpes verdes de espinacas. Son la prueba de que comer sano puede ser increíblemente delicioso y divertido. ¡Me encantaría leer vuestros comentarios y ver vuestras fotos si las preparáis! ¿Tenéis alguna otra idea de relleno o queréis que prepare una variante de esta receta? No dudéis en pedírmelo en el formulario de contacto o en los comentarios. ¡Hasta la próxima receta, cocinillas!
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