Hoy te traigo una receta que te va a sorprender tanto por su sabor como por su originalidad: croquetas de boniato y queso azul. Son cremosas por dentro, con un contraste entre lo dulce del boniato y el punto intenso y salado del queso azul que las hace irresistibles. Perfectas como entrante diferente, para una cena informal con amigos o incluso como aperitivo en una ocasión especial. Me encanta prepararlas en otoño, cuando el boniato está en su mejor momento, pero honestamente… cualquier excusa es buena para hacerlas. Además, son una forma diferente y deliciosa de variar de las croquetas tradicionales, y si eres amante del queso ¡esta receta te va a enamorar!
Tiempo de preparación: 25 minutos (+ 30 minutos de reposo)
Dificultad: Fácil
Raciones: Para 4 personas
Ingredientes
- 400 g de boniato (camote), pelado y cocido
- 100 g de queso azul, troceado
- 1 huevo
- 30 g de harina de trigo (más extra para rebozar)
- 50 g de pan rallado
- Sal y pimienta al gusto
- Nuez moscada (opcional, una pizca)
- Aceite para freír
Preparación paso a paso
- Cocina el boniato troceado en agua con una pizca de sal hasta que esté muy tierno, unos 15-20 minutos. Luego escúrrelo y aplástalo con un tenedor hasta hacer un puré.
- Añade al puré de boniato el queso azul en trozos pequeños, sazona con sal, pimienta y si quieres, una pizca de nuez moscada. Mezcla bien hasta obtener una masa cremosa y homogénea.
- Agrega la harina al puré y mezcla hasta integrar completamente. Deja reposar la mezcla en la nevera durante 30 minutos para que coja cuerpo y sea más fácil de manipular.
- Pasado el tiempo de reposo, forma pequeñas croquetas con ayuda de dos cucharas o con las manos ligeramente enharinadas.
- Reboza cada croqueta pasándola primero por harina, luego por huevo batido y finalmente por pan rallado.
- Calienta abundante aceite en una sartén y fríe las croquetas por tandas hasta que estén doradas y crujientes por fuera. Sácalas sobre papel absorbente.
- Sírvelas calientes para disfrutar de su interior fundente. ¡Una delicia!
Consejos de Nuria:
- Si quieres una textura aún más cremosa, puedes añadir un chorrito de leche o crema a la mezcla de boniato antes de enfriar.
- Puedes congelar las croquetas ya rebozadas y freírlas directamente desde el congelador cuando las necesites.
- El queso azul se puede sustituir por otros quesos fuertes como gorgonzola, roquefort o incluso un queso de cabra maduro.
- Para una opción más ligera, puedes hornearlas a 200°C durante 15-20 minutos, pinceladas con un poco de aceite.
Estas croquetas de boniato y queso azul tienen ese equilibrio perfecto entre lo casero y lo gourmet. Anímate a probarlas y cuéntame qué te han parecido en los comentarios. ¿Te gustaría que hiciera una versión vegana o sin gluten? Escríbemelo y me encantará prepararlo para ti.
Descubre más desde Hoy Cocina Nuria
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.



