Hoy te traigo una de esas recetas que reconfortan el cuerpo y el alma: la sopa castellana con huevo, también conocida como sopa de ajo. Es un plato muy tradicional en la cocina española, perfecto para los días fríos o cuando simplemente necesitas algo cálido que te abrace desde dentro. Su origen humilde se remonta a las cocinas rústicas de Castilla, donde los ingredientes sencillos, como el pan duro y el ajo, se convertían en manjares llenos de sabor. Lo que hace especial esta sopa es su sencillez y al mismo tiempo su profundidad, con ese toque ahumado del pimentón y la cremosidad que aporta el huevo escalfado al final. Ideal como primer plato para una comida casera o incluso como plato único para una cena ligera, seguro que te sorprenderá lo sabroso que puede ser algo tan simple.
Tiempo de preparación: 25 minutos
Dificultad: Fácil
Raciones: Para 4 personas
Ingredientes
- 4 huevos frescos
- 150 g de pan del día anterior (preferentemente tipo rústico o barra)
- 4 dientes de ajo
- 1,5 litros de caldo de carne o agua con una pastilla de caldo
- 100 g de jamón serrano en taquitos o en tiras
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- Pimienta negra (opcional)
Preparación paso a paso
- Corta el pan en rebanadas finas o en dados pequeños. Si está muy duro, no te preocupes, se ablandará con el caldo.
- Pela los ajos y lamínalos finamente.
- En una cazuela grande, calienta el aceite de oliva y sofríe los ajos hasta que estén ligeramente dorados. Vigila que no se quemen para evitar amargor.
- Añade el jamón serrano y rehoga durante un par de minutos más para que suelte su sabor.
- Agrega el pan y remueve bien para que se impregne del aceite y los sabores. Cocina durante unos 3-4 minutos.
- Retira la cazuela del fuego, incorpora el pimentón y mézclalo bien con el resto de ingredientes (hacerlo fuera del fuego evita que el pimentón se queme).
- Vuelve a poner la cazuela al fuego y vierte el caldo caliente. Remueve suavemente para distribuir el pan.
- Cocina a fuego medio unos 10-15 minutos, hasta que el pan esté muy blando y la sopa haya espesado ligeramente.
- Prueba y ajusta de sal. Si quieres, añade un poco de pimienta negra.
- Rompe con cuidado los huevos sobre la sopa (uno por persona) y cocina durante 3-4 minutos con la cazuela tapada, hasta que las claras estén cuajadas y las yemas aún líquidas.
- Sirve caliente y, si lo deseas, decora con un pelín de pimentón por encima o un chorrito más de aceite de oliva virgen extra.
Consejos de Nuria:
- Puedes usar pan integral o multicereal si quieres una versión más rústica y con más fibra.
- ¿Te gusta más contundente? Añade un poco de chorizo en rodajas junto al jamón para darle un toque picante y ahumado.
- Si no te convence el huevo escalfado, puedes batir los huevos y verterlos en hilo mientras remueves. Te quedará tipo “sopa de huevo chino” pero con sabor castizo.
- El caldo de carne casero aporta un sabor más profundo, pero puedes usar uno de pollo o incluso solo agua si haces una versión más ligera.
- Acaba la sopa con un poco de perejil fresco picado para añadir un toque de color y frescura.
¿Listos para revivir una tradición en vuestra mesa? Esta sopa castellana con huevo es perfecta para quienes buscan platos de toda la vida que no fallan. Si la preparas, me encantaría saber cómo te ha quedado. ¡Déjame un comentario o cuéntame si quieres una versión vegetariana o con otro tipo de pan!
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